martes, 30 de agosto de 2011

Dime donde estudiaste y te diré...


El debate sobre educación es muy amplio, pero básicamente el entrampamiento se produce debido a que el gobierno ofrece medidas para "regularizar" el lucro y los estudiantes piden "acabar de raíz" con el lucro. ¿Por qué?

Chile es uno de los pocos países en el mundo donde el estado invierte tan "poco" dinero en educación, esto lleva a buscar otros medios de financiamiento lo que inevitablemente nos plantea como única solución una educación de "empresarios" con el lucro de por medio.
Las universidades estatales ofrecen educación de calidad y con aranceles mas razonables que una universidad privada.

El punto es que los alumnos que acceden a las universidades estatales generalmente son aquellos que han tenido una muy buena preparación, llámese colegios particulares o pagando muy buenos pre-universitarios los cuales tienen un alto costo. Son muchos menos los alumnos de situación socio-económica "medio-baja" que cuentan con una posibilidad cierta de acceder a estas instituciones y que terminan "invirtiendo" grandes sumas de dinero, con créditos interminables en una universidad privada. 

Hay que hacer la salvedad que no todas las universidades privadas "lucran" pero como ese tema no está regulado nadie fiscaliza y los alumnos terminan en terreno de nadie.
 Aquellas universidades que efectivamente lucran no garantizan educación de calidad, debido a que el alumno es considerado un "cliente" y ninguna empresa quiere perder clientela por muy malos resultados que se obtengan, por lo que el criterio para calificar a un alumno queda fuera de toda objetividad.

Pongamos un ejemplo, si usted tiene que realizarse una operación al cerebro que médico elegiría ¿uno que estudió muchos años y recibió su título luego de mucho esfuerzo y trabajo, o aquel que pagó por su título de medicina?
Esta desigualdad se traduce en segregación y falta de oportunidades para los egresados, dependiendo del membrete que lleve su título, es decir, dime en que universidad estudiaste y te diré que tipo de profesional eres. Tenemos entonces estudiantes altamente endeudados y en clara desventaja al momento de enfrentarse al mundo laboral.

En definitiva, necesitamos reformar y mejorar la educación desde su base, es decir la inversión debe ser a partir de la educación básica, solo así aseguramos alumnos que lleguen bien preparados a la universidad la cual a su vez deberá contar con un alto nivel de exigencia para garantizar el desarrollo pleno de todo el potencial con que cuenta el alumnado y que hoy por hoy no es explotado.

Finalmente y como conclusión, al modificar el actual sistema y hacer que el estado sea garante de una educación equitativa, de calidad y mas accesible, nos aseguramos de tener mejores profesionales y a su vez de que estos mismos profesionales tengan la misma oportunidad de ingresar al mundo laboral en igualdad de condiciones.
Teniendo en cuenta estos antecedentes ¿será necesaria una reforma educacional? Juzgue usted mismo.

viernes, 26 de agosto de 2011

Los Sonidos del Cambio


Mi hija tiene 13 años, anoche fuimos a cacerolear a  la plaza de la ciudad ¿por qué? dirá usted o ¿para que?
 La razón es simple. Chile está viviendo un momento histórico, por primera vez en muchos años tenemos en nuestras calles un movimiento estudiantil que partió muy tímidamente, con muchachos algo desorientados y ansiosos, creo que la única convicción clara era sacar toda la rabia contenida luego de tantos y tantos años de injusticia social y desigualdad, pues bien, esta "pataleta de niños" hoy tiene de rodillas a un gobierno de poderosos empresarios.

 Estos jóvenes tienen hoy la posibilidad cierta de inscribirse en la historia con un tremendo cambio social, como lo es una reforma tributaria, o mas aún una reforma constitucional que garantice educación de calidad para nuestros niños y por ende una mejora y crecimiento de la sociedad en su conjunto. 

Y ahí estábamos nosotras, cada vez que mi cuchara de palo (herida de tanto golpear el metal) producía aquel sonido estrepitoso sentía en mi corazón un gozo casi infantil, sentía que cada golpe dado era una conciencia más que despertaba a esta nueva posibilidad, y eramos muchas almas golpeando y golpeando...  lo más importante, cada vez que miraba a mi lado, ahí estaba ella, sonriendo, saltando cada vez que los canticos lo ordenaban, mirando con ojos curiosos un espectáculo nunca antes visto en las calles de nuestra ciudad tan conservadora y pacífica...

 Estimados padres en unos años mas cuando su hijo esté en la universidad, tendrá que estudiar este fenómeno social, y entonces tendrá dos posibilidades, una de ellas es que los aprenda de los libros y lo asimile simplemente como parte de la Historia de Chile, pero está la otra opción, aquella en que apelando a su memoria podrá decir, “yo estuve ahí, yo lo viví, yo fui parte de ese cambio, esta es la historia de mi país pero también es parte de mi historia”. Cada uno decide.